La breve historia sobre mi descubrimiento del café de especialidad

¡ Bienvenid@s a tod@s !

Antes de nada quiero explicar que este blog trata única y exclusivamente sobre mis experiencias probando café de especialidad.

Y para ello me gustaría contaros como fue ese primer encuentro con esta clase de café.

Todo empezó hace ya casi 4 años, cuando un amigo de Lugo, amante de la nutrición y vida sana, regente de una tienda de alimentación y cosmética orgánica( "Naiterra") me recomendó probar un café que preparaba un chico venezolano, muy atento y agradable, en una pequeña cafetería(" Ratiños") de la "zona vieja" de Santiago de Compostela.

Me parece interesante revelaros, que yo no era un bebedor asiduo de café, porque sencillamente no me gustaba. Por aquel entonces, más bien disfrutaba de los tés verdes japoneses(de sabor muy herbal), del té blanco( suave y delicado), del té azul (semifermentado) y del mate( de buen amargor) como ritual familiar.

Pero volviendo al grano, aquel primer sorbo de ese café en Ratiños me dejó maravillado, y, desde ese día, siempre que tenía ocasión, iba muy ilusionado a tomarlo allí y a saciar mi curiosidad geminiana, inundando a preguntas al paciente barista sobre el porqué de ese aroma y sabor tan especial.

No tardé mucho tiempo en empezar a comprarlo para llevar a casa, y con ello en descubrir, que "San Agustín" era su tostador...

El primer café de especialidad que probé aquel día del verano del 2019 fue un Colombia llamado "El Diamante" y "su brillo" cambió completamente mi percepción sobre estas deliciosas semillas tostadas.

Enrivivega